Reúno palabras, transmito emociones y decreto deseos.
Yo escribo a los milagros que son vacíos e imposibles.
Escribo a los sueños, pedazos de ilusión y de festivos caminos y promesas.
Escribo a los amores y a los fracasos, a el deseo de la carne y la pasión temblorosa de una piel.
Escribo a un alguien imaginario, ideal, intangible y etéreo.
Escribo a alguien que paso por mi cara y no pude atrapar en la fugaz chispa de un momento.
Escribo a alguien de carne y hueso, carbón y agua.
Escribo a alguien lleno de defectos y que me enamora sin embargo.
Escribo por que soy disfuncional socialmente y emocionalmente discapacitado.
Escribo por extensión y por ser eterno y ser leído eternamente.
Escribo a quien pueda leerme y a quien yo permito hacerlo.
Escribo para no ser un recuerdo. Escribo... para mi.