domingo, 27 de noviembre de 2011

Intriga

Te escribo para herir tu corazón de intriga, escribo por anhelar un beso y anunciar caricias y bendiciones. La intriga romantica y elegante del juego de la seducción.

lunes, 17 de octubre de 2011

Todos le escribimos a alguien

Yo le escribo a fantasmas, a pensamientos, a fantasías y a anhelos.
Reúno palabras, transmito emociones y decreto deseos.
Yo escribo a los milagros que son vacíos e imposibles.
Escribo a los sueños, pedazos de ilusión y de festivos caminos y promesas.
Escribo a los amores y a los fracasos, a el deseo de la carne y la pasión temblorosa de una piel.
Escribo a un alguien imaginario, ideal, intangible y etéreo.
Escribo a alguien que paso por mi cara y no pude atrapar en la fugaz chispa de un momento.
Escribo a alguien de carne y hueso, carbón y agua.
Escribo a alguien lleno de defectos y que me enamora sin embargo.
Escribo por que soy disfuncional socialmente y emocionalmente discapacitado.
Escribo por extensión y por ser eterno y ser leído eternamente.
Escribo a quien pueda leerme y a quien yo permito hacerlo.
Escribo para no ser un recuerdo. Escribo... para mi.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Tengo un sueño sabor mandarina

Tengo un sueño sabor mandarina,
Escurridizo y extraño
y entre mas conozco de él,
entre mas lo sueño y lo conozco,
mas duele despertar y separarse de su nectar.
Como es cruel el amor y como es inoportuno
mal atinado y nunca bien colocado su dardo.
Como hace escapar la esperanza y nos hace cazar
con la fea resignación.
Que fácil se vuelve regalar afectos y caricias,
que bien se siente perder pedazos,
que poca regeneración.

Tengo un sueño sabor mandarina.
Apareció un día
como las fantasías que se asoman por mi ventana
con sus ojos me planteó un reto:
el de aceptar que me queda algo de corazón.

Tengo un sueño sabor mandarina
y me niego a la posibilidad aunque sea remota
de dejar de soñar
de asistir a los rincones a los que me accede
de seguir descubriendo mas defectos
de encontrarme entre sabores frutales.

Tengo un sueño sabor mandarina,
que me fue regalado para darle suspenso
y mas sabor a la soledad merecida.
Para seguir repartiendo amores.

Tengo un sueño sabor mandarina,
ácido, dulce, repentino
agreste, excitante, emocionante
y en su calidad onírica
me desplaza por mi juventud
y corrompe mi refugio hostil
y se atreve a desafiar mi amargura.

Tengo un sueño sabor mandarina
y en su cítrica redención me quiero perder
me encuentro un su piel y su color lila
y en sus sorpresas ecuatoriales.

Tengo un sueño sabor mandarina,
y lo paseo y presumo
como fingiendo que estoy despierto
que es tangible y que me conforma
y me da estructura y me rejuvenece.

Tengo un sueño y no se me da la gana
levantarme a ver si solo lo soñé,
se me da la gana vivirlo en su jugo
y ahogarme.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Esperanza y década

Volví a buscarte me dijeron que me detuviera y que me rindiera

En vez de eso, me vestiré de alegría, usare la mascara preferida por todos

y seré complaciente aunque me cueza por dentro.

Dejare a Aznavour y emprenderé una empresa:

La de pulir mi mascara y hacerla alegórica y consecuente.

Dicen que con esa receta de pintarle felicidad llegaras tu sola.

Me he vuelto un agnóstico de de tales fantasías

y un cínico escéptico de estos azahares y tan complicados rituales.

Sin embargo preparare mi barniz y veremos el resultado.

Destino

Venga ahora la ola de flechas y el rosario de ignominias

sea pues la hora justa, la portadora de la terrible noticia eterna

la madrugada como frío aviso del cadalso de mis versos de amor.

Tenga piedad la pasión y la fe que no tuvieron durante años.

Aquí espero la sentencia y aquí espero con furia mi castigo

no deje pupilos ni libros ni viudas.

Venga pues el rayo de luz que anuncia otro nacimiento,

frugal esta vez.

De nuevo fabricaremos sueños y diminutas alegrías que constituyen

una fina y delicada paz.

Recuerdo de tí

Tomare de ti la voz y me envolveré en tus palabras y el color del sonido,

terminare tus frases y las veré por mi pecho y permitiré la resonancia en mi cabeza,

compartiré tu corazón, cuando este late con melodía y a mi favor,

desecharé tu soberbia y tus infulas de saberlo todo,

me quedare con tus ojos que radian luz que aunque economizada, brillante,

es fría y pocas veces cálida pues has decidido no iluminar a todos.

No me enamore de tu boca sencilla ni de tu cuerpo delicado,

si no de la poca luz que pude ver y la ternura oculta bajo el roble de tu frialdad.

Me llevare de recuerdo los tus pies y tu andar, tu luz y tu calor tus manos frías

y tu aliento oculto olvidare lo demás.

Anhele tu lengua, tu humedad, tu piel y tus suspiros.

Fabrico sueños....... fabrico sueños.

¿Quien hablo de rencor? Si nomas queda amores mientras haya pedazos de ti para amar.

Sin Dirección

El viento tiene un sabor distinto a partir de hace unos años,

se ha vuelto denso y aunque respirable ya no me permite bailar,

el tiempo ha pasado y mis pies están duros y secos,

con las manos he creado tanto y aun con sus dotes anhelan,

el corazón sueña y palpita igual que hace años,

y se atreve a impulsar un cuerpo y un alma ya cansados,

todo este resto no concluye una dirección,

solo sigue encantos colores y formas delicadas sin pensar,

será el corazón quien lleve todo a la perdición o a la salvación.

Volar

De verdad tengo ganas de escuchar a mi corazón cantar,

abrir los brazos y hacer remolinos de viento,

despegar los pies y ver todo desde arriba,

soplar y dejar caer mi palabras hacia abajo.

Me veo cada vez mas alto y me imagino que puedo volar,

suplo a las nubes y al llamado todopoderoso

en el quehacer de gobernar los cielos y dominar al mundo,

me puedo reír de mi mismo desde las alturas y de todo y de todos.

Me asumo omnipotente y te tomo de los cabellos y te arrastro por las calles,

cobro venganza y me corrompo hasta el limite de mi infamia.

Despierto en el vagón del metro y mi venganza no se consumó.

Volar (segunda parte)

Es delicioso el viento,

parece volver a llenarme ahora que estoy tan vacío

y sin embargo mi cuerpo pesa.

En verdad quise volar;

Pero construí mis alas de materias sintéticas...

sin duda.

Practique y las agité,

hice planes de vuelo,

lleve mis plumas y también mis lapices,

probaría el aire frío y caliente

y probaría también que volaba,

que sabia hacerlo.

Nunca aprendí y...

La naturaleza de mis alas no es ligera,

no aprendí siquiera a levantar el vuelo.

No se volar como los demás,

solo abro los brazos y pongo la cara al sol,

llamo al viento y finjo no tocar la tierra.

jueves, 27 de enero de 2011

Uno

Uno despierta sin sentido ni dirección ni rumbo.

Uno respira sin contener nada ni dejar más que aire sucio.

Uno se alimenta y bebe y todo es efímero.

Uno recoge pedazos de sí mismo a diario y busca donde colocar las piezas.

Uno busca hacia dónde dirigir la mirada y por lo tanto los pies.

Uno tiene hambre y sed y llanto y deseo y furia y pasiones.

Uno planea y urde ocasiones para el crimen.

Uno se regodea en el acto mismo del placer.

Uno se revuelca entre espinas y demuestra que vive.

Uno acaba por diluirse entre la muchedumbre.

Uno se resigna a ser un engrane pequeño de una maquinaria.

Uno se avecina, pronto y sin certidumbre aun.

Uno está enfermo, solo, inútil y podrido.

Uno se encuentra a sí mismo por la noche, se horroriza y grita.

Uno se manifiesta en papel tinta pintura letras y escena y desaparece.

Uno escupe fuego para ser despreciado y seguir su rumbo a solas.

Uno se retuerce de rabia y se bebe su furia y se ahoga de veneno.

Uno es arrollado por la estampida de los exitosos y es avasallado por el éxito.

Uno desperdicia su talento y en el onanismo se lleva a la tumba su obra.

Uno cree que se acostumbra al dolor ya hasta le encuentra gusto.

Uno se parte el corazón y lo ofrece a los miserables que no aprecian su generosidad.

Uno va escondiéndose de los amores y entre matorrales lo espía.

Uno vaga por las calles encontrando su reflejo sigue perdido.

Uno desmantela sus emociones y adjudica al amor su amargura.

Uno prefiere estar solo rodeado de desconocidos que solo rodeado de hipócritas.

Uno se cree acostumbrado al martirio y no comprende la alegría ajena.

Uno pone en entredicho las palabras de los que dicen tener la razón.

Uno le advierte al mundo de su próxima grandeza imaginaria.

Uno se cuelga sambenitos de hazañas y epopeyas ficticias muy pronto se sabrá la verdad.

Uno cabalga por praderas y por el campo llano y se cree imperdible.

Uno ejerce el desprecio y la apatía por lo que se solía atraer.

Uno se recuesta para ver al mundo caer y esbozar una sonrisa.

Uno se burla del caminar de la gente y satiriza sus conductas

Uno vive hasta morir y muere viviendo y sueña amando y despierta llorando.

Uno no se deja caer y sigue siendo azotado hasta escupir sangre.

Uno se ha vuelto irónico ante el dolor y se bebe sus lágrimas cuando tiene sed.

Uno se calla la boca cuando hablan las heridas y escurren por el camino.

Uno está cansado y camina por caminar y habla por seguirse escuchando.

Uno acaba por volverse loco y falta mucho por recorrer y se vuelve cínico.

Uno no sabe terminar y sigue escribiendo hasta dejar de ser coherente.

Uno será leído y tal vez olvidado y nada cambiara.

Uno vera la noche boca arriba y no sucederá nada… nada.

domingo, 16 de enero de 2011

Para el corazon marchito

Tendrá que ser regado con versos suaves
sin lisonjas banas ni periplos huecos
si no fertilizado de amores y caricias y canciones
que no se sequen tus hojas que viene la primavera
llena de encanto y de sabores y colores vivos
que no se calle tu boca ni tus palabras dejen de volar
que hay aliento de sobra voz por alardear.